En vísperas de la celebración del Día Mundial de las ONG, queremos compartir esta iniciativa de carácter social con la que nos vinculan muchas cosas, por encima de todas ellas, la admiración por los fines que persigue y por la ayuda real y tangible que proporciona a familias en riesgo de pobreza y exclusión social. Es la Fundación Tengo Hogar, con la que desde MIG y sus empresas participadas colaboramos económica y materialmente para sumar nuestro pequeño granito de área, minúsculo en comparación con el que llevan a cabo sus impulsores.
La Fundación Tengo Hogar, creada hace siete años, pone el foco en reimpulsar vidas, una actividad que se ha redoblado tras el impacto de la pandemia, que ha provocado una disminución de los ingresos de los hogares de entre el 50% y 70%. No se dedican a dotar de recursos materiales a las familias, sino a un apoyo integral basado en que cada persona que atienden es la protagonista de su propia historia, de su propio cambio. La Fundación es solamente un empujón, convencerles de que juntos saldremos adelante.
Cuando conocimos esta iniciativa, hicimos una presentación interna con su Presidente y a muchas compañeras y compañeros se les vieron ojos enrojecidos a través de Teams al escuchar la descripción de las situaciones que abordaban. Ese día, se nos removió el deseo de ayudar y conocer más en detalle qué había tras la iniciativa y cómo podíamos ayudar.
Una realidad que no queremos ver
Esther Macías, coordinadora de Acción Social de la Fundación Tengo Hogar, nos contaba hace poco como son de duros estos momentos para las familias españolas, pero como también son estos momentos de crisis donde la solidaridad se desborda.
En la actualidad, la organización ha adaptado la forma de atender a las más de 90 familias vulnerables con las que trabaja a través de internet, para lo que se entregó un centenar de dispositivos digitales, ordenadores y tabletas y se dotó de conexión WIFI a los hogares. De esta forma se ha garantizado la educación de más de 150 niños.
Asimismo, han proporcionado más de 600 ayudas en alimentos, acciones de ocio e, incluso, la participación en momentos familiares gracias a menús de restaurantes colaboradores y viviendas temporales.
Pero Esther también nos decía lo difícil que va a ser 2021. Cada día más familias están al borde de la exclusión. Conseguir trabajo y alcanzar una estabilidad económica va a ser un reto tremendo para muchas personas.
Su mundo versus nuestro mundo
En nuestro mundo de teletrabajo, Teams, Salesforce, Saas, innovación, transformación digital, campañas, target, demanda, etc. Esther nos devuelve a la realidad: uno de sus principales focos de trabajo en este 2021 es romper la brecha digital. Una vez que se ha facilitado conexión y dispositivos el objetivo ahora es proporcionar “contenidos virtuales para aprovechar al máximo las herramientas: clases de refuerzo escolar, talleres para niños sobre ciencia, cultura, deportes, creatividad, visitas a museos, juegos, entre otras actividades”, afirma la coordinadora de Tengo Hogar.
Los niños y niñas como centro de todo
Una de las principales labores de Tengo Hogar es conseguir que los niños que están en la Fundación cuenten con todas las necesidades cubiertas. Para ello, una de las principales formas de trabajar es a través de actividades de ocio y formación.
Las actividades que llevan a cabo se centran en enriquecer y contribuir al desarrollo de los menores durante el tiempo que sus familias se encuentren en una situación de crecimiento profesional.
Esperamos haberos ayudado a entender un poco mejor cómo el mundo lo mueven corazones como los que están tras Fundación Tengo Hogar. Animaros y apoyad la iniciativa. No cambiaremos todo el mundo, pero estaremos un poco más cerca de hacerlo.