La Supercopa de España de Baloncesto en Málaga no solo reunió a cuatro de los grandes del basket nacional (Real Madrid, Unicaja, Valencia Basket y Club Baloncesto Gran Canaria), sino que también se convirtió en el escenario perfecto para demostrar el poder de las activaciones de marketing experiencial.
En MIG Prisma hemos tenido la suerte de acompañar a Pelayo Seguros en este reto, dentro de una relación que arrancamos a comienzos de este año. Desde el mes de junio venimos trabajando juntos en el diseño de un proyecto que se ha materializado con éxito en Málaga y que tendrá continuidad a lo largo de la temporada.
Un balance lleno de energía y resultados
El fin de semana fue un éxito en todos los frentes:
- Activaciones de ambient que multiplicaron la presencia de la marca en los puntos de encuentro de los fans.
- Promociones y dinámicas que generaron interacción real y reforzaron la cercanía de Pelayo con sus clientes, así como la generación de leads.
- Contenidos digitales y sociales que amplificaron el alcance del patrocinio más allá del pabellón.
- Momentos únicos y memorables, como el ensayo de El Triplazo, donde nuestra compañera Paloma, exjugadora y apasionada del basket, encestó desde el medio campo en el primer intento, convirtiéndose en una anécdota que refleja la autenticidad y la pasión que ponemos en cada proyecto.
Todo ello con un mismo objetivo: que el patrocinio se viviera como una experiencia de marca, cercana y sorprendente, que reforzara el nuevo claim de Pelayo, “Pelayo está”.
Nuestra visión: las activaciones como motor de conexión
En MIG Prisma creemos que el valor de una activación de marketing no está en la acción en sí, sino en el impacto que genera en las personas. Por eso cada idea la concebimos con un mismo enfoque: aportar diferenciación a través de experiencias únicas que se recuerdan, provocar interacción invitando a la audiencia a participar, sentir y compartir, y conectar emocionalmente porque el marketing deportivo no solo habla de equipos y resultados, sino de comunidad, valores y pasión compartida. Además, siempre buscamos que la acción física se amplifique en el entorno digital, prolongando la vida de la experiencia y multiplicando su alcance.
De esta manera, las activaciones dejan de ser un complemento para convertirse en el núcleo de la estrategia de patrocinio, capaces de transformar un logotipo en un recuerdo positivo y duradero.
El resultado: un auténtico triplazo de oportunidades
El trabajo conjunto entre el equipo de Pelayo y el de MIG Prisma nos permitió vivir el patrocinio como lo que realmente es: una oportunidad para crear conexiones reales con las personas. Los resultados hablan por sí solos: una experiencia compartida por miles de aficionados en Málaga, una marca que se percibe más cercana para clientes y seguidores de Pelayo y una historia que comenzó en junio y que tendrá continuidad, llevando nuevas sorpresas y activaciones a toda España.
Porque si “Pelayo está”, en MIG Prisma queremos estar junto a todos sus retos. Y este viaje con el basket solo acaba de comenzar.
